Luego de una dulce espera pasaron los casi 30 dias para que Alice in Chains pudiera dar su tan ansiado concierto a los cientos de fanaticos, que 4 horas antes de que éste comenzara ya estaban abarrotando y alborotando el ingreso, ocupando toda la vereda y parte de la pista fuera del coliseo.
Entre estos muchachones y muchachonas dark estaba yo, tan solo como único pelo en cabeza de calvo, ya que no puede convencer a nadie de ir conmigo al recital, cosa que no me amilanó, todo lo contrario, me dió esa gallardia para aventarme a mi primer concierto “grange” con el grupo de mis amores. Asi que vestido con mi mejor pantalon negro, mi única casaquita oscura, mi chalina antidolor de garganta y mis lentes con lunas super limpias para poder ver bien todo y no perderme ningún detalle a las 6.30pm ya estaba haciendo mi colita para entrar al pequeño coliseo en forma de caja que por esa noche se iba a convertir en la gran catedral de la música.
Me encontraba digamos como a unos 200 metros del ingreso respetando mi orden de llegada como toda persona civilizada, pero con el pasar de los minutos la civilización se iba yendo al inodoro asi que no aguante y se me salió lo peruano sin querer queriendo, comencé a ver por cual huequito de esa interminabile fila me podia meter sin mucho roche y llegar lo más cerca que pudiera a la puerta de ingreso. Luego de un prufundo análisis logré individuar a mis victimas, asi que sin remordimiento alguno me acerque a un grupo de jovencitos bastante alegres, creo por los litros de vino que se venian tomando, y les dije, aquí estaba haciendo mi cola hace rato!, sin decir una sola palabra me dejaron pasar y me ofrecieron un poco de vino para olvidar ese frio navajero, acepte sonriente de oreja a oreja, que más me daba, iba a ser uno de los primeros en entrar.
A las 8.10pm ya estaba parado como un mastil a unos 4 metros del escenario, con un ansia tan grande como si estubiera esperando el nacimiento de mi bebé. Poco a poco el coliseo se empezó a llenar mientras la gente del backstage ultimaba detalles, afinando guitarras, bateria, luces y sonido. El escenario era bastante simple, todo en negro, con un ecrán en la parte posterior para proyectar imágenes, tres microfonos en la parte delantera, la bateria en medio elevada al mínimo, con dos super columnas de metal a los costados que sostenían los parlantes que luego nos llevarían en trance al sentir la música de los progiosos y benditos Alice in chains...
...La musica de fondo en el coliseo se va desvanciendo las luces poco a poco se van apagando, se siente un gran silencio, la gente con los ojos bien abiertos y con cualquier aparato en mano que hiciera fotos esperamos a nuestros idolos! Y a las 9.15 pm el primero en asomarse al escenario es el batterista Sean Kinney, la gente sin control alguno comienza a gritar y aplaudir coreando el nombre del grupo, luego por la parte izquierda y derecha contemporaneamente aparecen el bajista Mike Inez y el inconfundible Jerry Cantrell para el delirio de todos, segundos después se ubica en medio tomando el microfono William DuVall, el nuevo vocalista de los AIC, arrancando con una furia tremenda la tocada de este super grupo dejando atrás la era “Post-Layne”.
Bastó unos minutos para entrar bajo los efectos narcoticos de la guitarra de Jerry, regalandonos sus ineditas notas de manera realmente divina, mientras el pogo estaba en su punto más alto y Du Vall soltaba sus mejores gallos interpretando Man in the box, y claro yo en medio saltando con la adrenalina a mil, hasta que siento un derechazo en toda la cara que me regresa a la realidad, decidiendo salir de ese tumulto para disfrutar mejor del concierto, asi que a punta de empujones y algunas pataditas por debajo logré separarme de los pogueros, justo en el momento preciso, cuando por enesima vez los AIC cambiaban de guitarras para interpretar otro tema, tomaron sus banquitos se acomodaron bien y con guitarra acustica en mano, empezaron a tocar Down In A Hole! El coliseo ardia, todos cantando ese himno, siguiendo los compases del inmortal tema en su version unplugged, luego siguieron con Heaven Beside You y I Stay Away mostrando en el ecrán la imagén del mitico Layne al culminar esa canción, con un público en shock de la emoción al ver de manera al menos virtual a su entrañable ex-vocalista...
...Asi fueron pasando las 2 horas del concierto, con un Jerry que hacia de las suyas con su magestuosa guitarra, acompañado de un talentosisimo William DuVall quien se supo ganar el cariño de la gente con su carisma... Ya sin garganta, la vegina a punto de reventar y los zapatos recontra pisoteados, llega el tema final de la noche Angry Chair, cantado hasta más no poder con todos los presentes esperando que la canción dure una eternidad y seguir gozando de estos genios, pero luego 4.36 minutos de éxtasis llegamos al fin de este orgasmico concierto, que ni tomando una caja completa de viagra hubieramos podido tener ese placer casi celestial de esa noche. Terminada la canción los integrantes se asoman al borde del escenario, luego de dejar sus respectivos instrumentos, para saludar a la multitud y sentir los aplausos y los gritos de gloria de sus fans que les estarán seguramente agradecidos toda una vida por el tremendo espectaculo dado. Con la mano en alto Jerry y sus secuaces van dejando el escenario mientras la gente poco a poco vuelve a la realidad y yo trato lo más rápido que puedo de ir al baño para desalojar ese par de litros de pipi que por poco comienza a circular por mi sangre luego de tres horas de heróico aguante uff!...
...Ya con la vejiga relajada voy saliendo del coliseo como un simple mortal, claro, más contento que nunca, gozando hasta el último instante los recuerdos de ese espectacular concierto que se quedarán tatuados en mi mente para luego pasar esa locura a la pequeña FIFI sin duda alguna.
